El emprendimiento a través de la historia se ha manifestado como un proceso evolutivo en donde confluyen un sinnúmero de factores sociales, económicos y culturales, dicho proceso ha sido de vital importancia para la creación de proyectos que fundamentan el desarrollo económico social de una sociedad. El termino emprendimiento con el pasar del tiempo ha mantenido una gran flexibilidad que ha permitido incorporar herramientas que facilitan la creación de ideas diferenciadoras que dinamizan de una u otra forma la oferta de bienes y servicios que existen dentro de los mercados competitivos, incentivando a un incremento de la demanda por parte de los consumidores conllevando de esta manera a que exista un equilibrio y una tendencia al superávit en la economía.
Es pertinente resaltar la conceptualización actual que se tiene del termino emprendimiento entendido como aquella actitud y aptitud de la persona que le permite emprender nuevos retos, nuevos proyectos; es lo que le permite avanzar un paso más, ir más allá de donde ya ha llegado. Es lo que hace que una persona esté insatisfecha con lo que es y lo que ha logrado, y como consecuencia de ello, quiera alcanzar mayores logros.
Para que en la actualidad se puede hablar de una definición de emprendimiento se debe analizar este concepto como un término que a través de la historia ha tenido una evolución manifestada en sus inicios por el autor francés Richard Cantillon durante el siglo XVIII, el cual fue el que inicio la implementación del termino entrepreneur (pionero) en la literatura económica ,facilitando de esta manera que se empezara a dar que una mayor comprensión y conocimiento de los roles o funciones del emprendedor.
Cantillon define al entrepreneur como el “agente que compra los medios de producción a ciertos precios y los combina en forma ordenada para obtener de allí un nuevo producto” posteriormente a esta definición hubieron autores que complementaron y aportaron ideas para poder ampliar y darle una mayor aplicabilidad en términos económicos, se puede ver el caso de otro Francés Jean Baptiste Say, quien afirmó que el “entrepreneur” es un individuo líder, previsor, tomador de riesgos y evaluador de proyectos, y que moviliza recursos desde una zona de bajo rendimiento a una de alta productividad, en este aporte vemos un cambio en cuanto a las cualidades o funciones que debe tener el individuo para poder ser considerado como emprendedor, mientras que inicialmente era tenido más en cuenta la productividad que genera la combinación de los diferentes medios de producción.
Diferentes economistas también intervinieron en la evolución de la palabra emprendedor como lo fueron los autores británicos de la escuela clásica Adam Smith y Stuart Mill quienes definían este concepto bajo el término inglés “entrepreneurship”, pero Smith enfatiza en que los recursos de una economía deben alcanzar una máxima optimización para poder instaurar una homeostasis por lo que la dinámica del emprendedor no puede ser analizada bajo esta óptica y es considerado como una de las fuerza externas, por otro lado Mill reconoce el emprendimiento como la fuerza que impulsa el crecimiento económico.
En la medida en que se fue forjando todo lo concerniente al termino emprendimiento, nace la necesidad de poder inmiscuir este principio de manera formal a la parte productiva , fue así como Alfred Marshall alrededor de 1880 reconoce que no son tres sino cuatro factores económicos agregando a la organización como ese elemento que facilita la coordinación de los factores ya existentes (Tierra , trabajo y capital), pero detrás de este agregado se reconoce al emprendedor como aquella persona que optimizara los recursos y se encargara de su dirección, implementando un liderazgo oportuno.
Existen otros autores que quisieron retomar ideas tomadas por el francés Say acerca del emprendimiento, entre los cuales se puede citar a Schumpeter (1942) quien utiliza el término emprendedor para referirse a aquellos individuos que con sus acciones causan inestabilidades en los mercados. Define al emprendedor como una persona dinámica y fuera de lo común, que promueve nuevas combinaciones o innovaciones. Vemos este aporte como el punto de partida que permite incorporar el término innovación como unos de los componentes que una persona emprendedora debe adoptar en su conducta.
Peter Drucker unos de los teóricos más influyentes en el tema del emprendimiento afirma que el ser emprendedor no es un rasgo del carácter, sino una conducta. Según él, cualquiera que sea capaz de tomar decisiones puede aprender a ser un empresario innovador. Considera que la base del emprendimiento es teórica y no intuitiva. El emprendimiento resulta entonces un rasgo característico de un individuo o institución, pero no de personalidad; Podemos relacionar lo anterior con lo dicho por Say, puesto que resalta los rasgos característicos de un emprendedor.
Howard Stevenson, (profesor de la universidad de Harvard en los 80’) realiza un análisis similar al de Drucker, ya que expresa que crear negocios no es suficiente para ser considerado emprendedor. Un emprendedor, además de ser creador de una empresa, busca continuamente la oportunidad y generar nuevas riquezas.
Analizando la evolución del termino emprendimiento se encuentran un sinnúmero de autores como Cantillon, Say, Marshall, Smith, Mill, Schumpeter y otros que no mencionados pero no menos importantes como Ludwig Von Mises, Ismael Kizner, Scott kundel, que de una u otra forma aportaron ideas o concepciones que facilitaron crear un noción común de lo que se debe entender y diferenciar como emprendimiento y persona emprendedora, tomando como emprendimiento todo aquella acción que promuevan no solo la creación de proyectos innovadores sino también la sostenibilidad de estos a través del tiempo y el emprendedor es aquel sujeto líder, fuera de lo común que saca la mayor ventaja frente a las actividades o proyectos que desarrolla, esto refleja la transformación y aplicabilidad en la actualidad del termino emprendimiento.
Anderson Arregocés Arrieta
Kevin Balseiro Mercado
Susan De La Rosa Arroyo
Gustavo Fram Falla
Diana Rey Encinales
Ricardo González Molina
V semestre
Programa de Administracion de empresas
Bibliografía:
DRUCKER, P. 2002. El Individuo. Ed. Sudamericana. Pág. 197-203
BURNETT D. 2000. The Supply of Entrepreneurship and Economic Development. Founder Technopreneurial.com. www.technopreneurial.com/articles/ed.asp.
http://www.inta.gov.ar/barrow/info/documentos/desarrollo_local/emprendydesarrollolocal.pdf
http://www.finam.cl/contenidos/aliciacastilloholley/estado_arte_emprendimiento.pdf.